* Fiscal Chamorro efectuó recuento de los casos llevados a tribunales y no eludió enfrentar rumores que intentaron dañar su honra. Habladurías daban cuenta que se encontraba detenido, en circunstancias que en realidad estaba trabajando.
* Trabajo realizado por profesionales locales fue calificado como sobresaliente en la institución.
Hace pocos días finalizó el proceso de calificaciones al interior del Ministerio Público, donde el organismo resolvió situar en lista de “excelencia” el trabajo desarrollado por la fiscalía local de Angol en la persecución penal pública y apoyo a víctimas y testigos, además de lograr importantes resoluciones de casos que causaron alta conmoción pública en la capital de Malleco.
Este trabajo de promover la justicia no está ajeno de sinsabores, especialmente en una ciudad como Angol y donde el fiscal jefe, Luis Chamorro, se dio el tiempo de efectuar una evaluación del trabajo desarrollado en 2009, no eludiendo ningún tema, entre ellos un rumor que calificó como malintencionado y claramente destinado a dañar su honra, que corrió durante varias semanas en la zona y que hablaba que supuestamente se encontraba detenido en la cárcel, versión que según se ha logrado establecer, provendría precisamente de personas condenadas por delitos sexuales gracias al trabajo de esa fiscalía.
-Tomando en cuenta que el Ministerio Público debe dirigir las investigaciones criminales y ejercer la acción penal pública, respecto a experiencias anteriores, ¿Cuál fue el recuento que hacen del 2009 en su área?
-Fue sumamente ajetreado, pues tuvimos un ingreso superior a las cuatro mil 100 denuncias por distintos tipos de delitos, lo que se ha traducido en la existencia de fiscales especializados en Angol, lo que es exclusivo de fiscalías de mayor dimensión.
De hecho, los tres fiscales que prestan servicios poseen distintas especialidades, aparte de los delitos comunes que investigan en forma conjunta. La verdad estamos muy conformes este año, porque hemos tenido un número importante de condenas y varias de ellas muy relevantes a causa de hechos que causaron gran conmoción pública.
Estamos muy conformes y agradecidos por la colaboración que nos ha brindado la comunidad en torno a su participación en torno a su participación como testigos en diversos procedimientos que se produjeron durante el año y en particular por la colaboración que nos brindaron en el combate al tráfico de drogas y por el permanente contacto que mantenemos con las organizaciones comunitarias que nos permite estar atentos a las necesites de todos los sectores de la comunidad.
-Por la extrema delicadeza de sus funciones, las fiscalías y el desempeño de los fiscales están permanentemente siendo evaluados por sus autoridades superiores y Angol históricamente ha tenido en general buenos desempeños, ¿cuál fue la calificación otorgada en el último período?
-Precisamente ayer recibí mi calificación profesional efectuada por el fiscal regional y que fue bastante buena. Estoy muy agradecido por el reconocimiento efectuado por el fiscal regional en torno al trabajo que desarrollan todos los fiscales adjuntos de esta comuna, porque en la calificación del fiscal jefe también va inserta la calificación de la gestión de la fiscalía en general y estamos calificados en grado de “excelencia”, lo que aparte de ser una satisfacción, representa una tremenda responsabilidad de seguir cumpliendo con lo que dice la ley y lo que nos exige la comunidad.
- Este año que recién pasó Angol se vio conmocionado por algunos casos fuertes de delitos sexuales, como una violación en el sector de El Mirador de El Rosario y el descubrimiento de una red de prostitución infantil, ¿fue complicado poder llegar a esas ejemplificadoras condenas que se tradujeron en altos castigos para los autores?
-Siempre los delitos sexuales tienen la complejidad de que se tratan temas muy delicados que afectan la integridad, en particular de personas menores de edad y justamente este año nos correspondió una investigación bastante compleja en torno a esta red de prostitución infantil que terminó con condenas para todos los imputados y penas de 14 años de privación de libertad para los autores reiterados de violación impropia, prostitución infantil y abuso sexual infantil.
Pero también obtuvimos numerosas otras condenas por delitos de índole sexual, respecto de adultos que abusaron de menores y una violación en el sector del Mirador de El Rosario, donde se logró una pena ejemplificadora de privación de libertad y numerosos otros casos que no se ventilaron públicamente, y que involucraron la integridad de menores y donde también se obtuvieron penas de 10 y 12 años de privación de libertad de personas que actualmente se encuentran en las cárceles del país.
-¿Esto puede ser tomado como una señal de que en Angol las instituciones funcionan, se persigue y se castiga fuertemente a quienes los tribunales encuentran culpables de delitos?
-Afortunadamente tenemos la colaboración importantísima de ambas policías, pero en particular de la Policía de Investigaciones que ha desarrollado una expertísima labor, sin tener una brigada especializada de delitos sexuales en Angol, pero sí existe un grupo que está dedicado en forma preferente a esta temática, con profesionales que son muy eficientes y meticulosos en cada uno de los casos que abordan, lo que implica un fortalecimiento del trabajo en esta área, aumento de las condenas y una mejor calidad de las investigaciones que se realizan en estas materias y que finalmente se traducen en estas condenas emblemáticas.
Esto no sucede sólo en Angol, pues también en Renaico logramos la condena de un profesor que abusaba de sus alumnos, también hubo casos importantes de tráfico de drogas y donde sólo en el año recién pasado se lograron desarticular al menos cuatro grandes organizaciones. Una que reinaba en la población Trizano y que fue desbaratada con la ayuda de los propios vecinos que ya estaban cansados de lo que ocurría en ese lugar.
También se desarticularon dos grandes bandas que operaban en Renaico con importantes cantidades de droga que se extendían hacia Angol y comunas aledañas, lo que implicó poner a disposición de la justicia a un buen número de personas que actualmente se encuentran privadas de libertad por su responsabilidad en estos ilícitos.
Asimismo, se desbarató una banda de ingresaba drogas a la Cárcel de Angol, donde su líder era una persona que estaba detenida cumpliendo condena en ese recinto y las personas que les traían la droga fueron descubiertas, además de un funcionario paramédico de Gendarmería que está a punto se ser acusado por el delito de cohecho y por su responsabilidad en el ingreso irregular de especies al interior de la cárcel, como teléfonos celulares, lo que se tradujo no sólo en la investigación propiamente tal, sino también en un sumario que significó su destitución tras ser detectado por la investigación del Ministerio Público.
-Nos decía que el año pasado ingresaron aproximadamente cuatro mil 100 causas de distinto tipo, ¿eso se traduce en cuántas investigaciones en promedio para cada fiscal en un año?
-En aplicación de las políticas institucionales a través de su plan estratégico, se decidió dividir las funciones en dos grandes áreas, a cargo de los respectivos fiscales adjuntos que están distribuidas de acuerdo a su especialidad, como por ejemplo delitos sexuales, drogas, delitos funcionarios y económicos, violencia intrafamiliar, ley de responsabilidad penal adolescente, etc.
También está la tramitación de delitos de menor complejidad, que por lo regular poseen penas menores, las que son tramitadas por las unidades de tramitación masiva de causas.
Sin embargo, todas ellas pasan en algún momento por los fiscales que laboran en esta fiscalía, lo que da como promedio más de mil 300 causas por persona.
Tratamos de darle a las causas un término bastante rápido. El promedio de término de una causa de menor complejidad no supera los 140 días y la fiscalía de Angol terminó el 110% de las causas que tuvo en su momento. ¿Qué significa esto? Que terminamos más causas de las que ingresamos durante el año, lo que significa que también terminamos con las causas que estaban rezagadas del año anterior y actualmente no tenemos ninguna causa del 2008 vigente en esta fiscalía.
-¿Esto avala que el nuevo sistema procesal penal es más rápido que el antiguo?
-Eso es una verdad absoluta en todo Chile. Un juicio criminal de antes duraba en promedio dos o tres años, lo que permitía e implicaba que los implicados salían en libertad y cometían muchos más delitos mientras esperaban su condena.
Ahora las investigaciones no complejas no superan los seis meses, incluido el juicio oral y una causa compleja como la prostitución infantil, se abrió en marzo y hoy ya está concluida, lo que implica un avance en la eficiencia y minimización de lo tiempos que trajo la reforma procesal penal.
-Este año hubo cambios en el personal de Angol, fueron ascendidos algunos funcionarios y otros han llegado…
Nuestra administradora, Evelyn Morales, que estuvo con nosotros durante seis años, fue ascendida a la fiscalía de Temuco. Llegó Juan Ricardo Navarro que es ingeniero civil industrial como nuevo administrador de la fiscalía, profesionales que con su conocimiento y experticia contribuyen a mejorar nuestro trabajo.
Luego de seis años en Angol, el fiscal Jorge Mandiola fue ascendido a fiscal jefe de Purén, lo que es un paso en su carrera y lo que se traduce en un reconocimiento a la fiscalía de Angol, que permite que sus fiscales asciendan a cargos de mayor responsabilidad.
En reemplazo de Jorge Mandiola, asumió como fiscal Marcelo Herrera Valenzuela, que era abogado asistente desde 2004 y por su excelente labor fue ascendido por concurso público, por lo que empezamos el 2010 con nuevos desafíos.
-Angol es una ciudad pequeña y ya con el sistema antiguo a los jueces a veces les pasaba que cuando salían a la calle a caminar o al ir a comprar, inevitablemente se tenían que encontrar con personas que ellos mismos habían condenado, lo que los expone eventualmente a agresiones físicas, insultos, amenazas, incluso habladurías o calumnias. Usted no es juez, pero ¿es complicado hoy en día ser fiscal en Angol?
-Creo que vivir en Angol es maravilloso. Estoy enamorado de esta ciudad.
Es una labor muy compleja y delicada, porque el ejercicio de la acción penal te acarrea muchos enemigos y muchas veces la gente no entiende que uno está cumpliendo una función pública y no se trata de un tema personal. Lamentablemente eso se traduce en situaciones bastante desagradables en el diario vivir.
Tanto así, que hace pocos días me entero por terceras personas que se decía que supuestamente yo estaba detenido por un supuesto delito de violación y me encontraba en la cárcel. No tengo idea de dónde se dice que lo cometí, pero se decía que yo estaba privado de libertad. Eso es un rumor que comenzó a correr por la ciudad, sin base alguna. Tú sabes que los fiscales del Ministerio Público estamos sujetos a un control exhaustivo por parte de la Fiscalía Regional y también de la unidad contralora.
Por ende, es algo totalmente inaudito que un fiscal que se supone está formalizado o detenido, pueda en caso alguno estar prestando servicios y justo en la época que estaban corriendo estos rumores yo me encontraba trabajando en una seguidilla de juicios orales en Angol.
-Dentro de estos rumores, se decía que usted supuestamente estaba detenido en una cárcel de Santiago, otra versión que se encontraba recluido e incomunicado en Puerto Montt, imputaciones que terminaron incluso en oídos de autoridades locales. ¿Cómo toma Luis Chamorro habladurías de tamaño tenor?
-Ese rumor lo he tomado casi como una anécdota que demuestra que la función de fiscal es muy incomprendida y, lamentablemente, personas que han sido objeto de imputaciones criminales y condenados precisamente por delitos sexuales son quienes se dedican a repartir este tipo de rumores.
-Vale decir que esto se trataría de una especie de venganza por haber sido llevados ante la justicia...
-Hasta donde hemos indagado, porque el tema nos preocupó un poco cuando recién comenzaron a correr estos rumores, no por uno, sino por la familia y por las propias víctimas que son atendidas en esta fiscalía, quienes al enterarse de este rumor llamaron a la fiscalía para saber más de esta situación.
Hemos indagado en cuanto al origen de este famoso rumor y establecimos que nace en personas que precisamente fueron condenadas y privadas de libertad por delitos sexuales e intentan de esta manera enlodar el prestigio y la honra de un profesional que ha dedicado su vida al derecho y la justicia.
-El sentido común indica que cuando alguien trama una maquinación para enlodar a un fiscal, lo natural sería que esto se haga con la finalidad de sembrar la duda y que finalmente esa persona se vaya de la ciudad o deje de ejercer su cargo y así dar carta blanca a los delincuentes. ¿Tiene intenciones de irse de Angol?
-Bajo ningún punto de vista. Tenemos una responsabilidad importante con la comunidad, con la gente, con las víctimas y testigos que han participado de los procesos criminales y tengo un compromiso personal con Angol de tratar de hacerla una mejor ciudad cada día, dentro del ámbito que me corresponde a mi, que es la identificación y sanción de los delitos que se cometen acá.
- Vuelvo al tema, ¿nunca lo han amenazado a causa de su trabajo? Tomando en cuenta que inevitablemente en Angol existen muchos lugares comunes donde uno a diario se encuentra con personas que han sido condenadas.
-Sí, uno se encuentra habitualmente con personas que han sido objeto de condenas e imputaciones criminales, pero hasta ahora nunca se ha producido tampoco una agresión. Amenazas nunca han habido, salvo algunos exabruptos o insultos que de repente se han producido en audiencias, en el entendido que las personas o sus familiares a veces pueden malentender las situaciones y manifestar su frustración de manera poco apropiada, pero nunca una amenaza directa o golpes.
-¿Se siente angolino?
-Me siento angolino porque construí mi casa acá, hice mi familia acá y me siento un angolino por adopción y con mucho gusto, porque estoy encantado con la ciudad.
-En resumen, entre lo desagradable y lo positivo, ¿es más lo bueno que lo malo su resumen de Angol?
-Sin duda, esto del rumor es sólo para el anecdotario, pero cuando uno hace un balance serio de lo que han sido estos años de trabajo, sin duda estamos muy contentos.
